Caracas, 02 Jul. AVN.- La piloto Valeria
Carballo es reservada y a la vez muy segura de sí misma. Se muestra
calmada, pero recia al hablar al igual como cuando corre en las pistas
de la Fórmula 3 Europea. De allí proviene su apodo:"La Chama de Hierro",
un mote que recibió por su dominio y control al mando de un vehículo de
carreras.
"Realmente no se porqué me puso (el comentarista deportivo, Max Leffeld) La Chama de Hierro", refirió Carballo, admiradora de Milka Duno y Pastor Maldonado, figuras del automovilismo criollo en el mundo.
"Desde ese momento todas las personas me llaman así, creo que es porque simplemente soy muy competitiva en la pista y siempre estoy peleando las primeras posiciones y darle la talla a los hombres", señaló la joven deportista durante una visita este martes a la instalaciones a la Agencia Venezolana de Noticias en Caracas.
Con esa misma cordura y nervios de acero, la caraqueña compite actualmente en la Fórmula 3 europea, campeonato inundado de hombres. Su meta es abrirse paso en el automovilismo, un deporte dominado por el sexo masculino. Pero Carballo tiene el coraje y el valor para afrontar este reto.
"Soy mejor que ellos, tranquila, eres mejor que ellos", es la frase de inspiración que pronuncia para aumentar su confianza cada vez que sale a la pista.
Ese ritual le ha funcionado. "Los hombres se humillan, cuando quedan detrás de mi, quedan humillados, te miran así (de reojo)", describió la corredora que dejó su carrera universitaria como corredora de seguros para conducir autos.
No es de esas mujeres temperamentales que saltan a discutir por algún toque o choque. Por el contrario cuando algo no sale según lo planeado, se controla y piensa en frío como solucionar el incidente.
Por luchar para alcanzar su sueño ha sacrificado estar cercar de su familia, aunque confiesa que no fue tan dura su adaptación en el exterior. "He tenido bastantes sacrificios, ir a Europa y alejarte de tu familia, es lo más complicado, no puedes vivir en tu país, porque estas siempre haciendo entrenamientos allá. Es bastante fuerte para mi como mi familia".
Continuó: "Llegué de cero (a Europa), no conocía ningún circuito, ningún equipo y fue bastante duro, y conté con la suerte de entrar a un equipo italiano, pero que lo dirigiría un costarricense y con la gente latina te las llevas mejor y eso me ayudó muchísimo, aprendí mucho con ese equipo y el golpe no fue tan fuerte, fue más fácil de lo que esperaba".
Sin miedo
Carballo tuvo 9 años en karting, cuando fue conocida como la "Chama de Hierro". Fueron sus primeros momentos de adrenalina en la disciplina.
Compitió en la Fórmula Renault italiana 2.0 con el equipo Costa Rica, y en 2012 llegó a la Fórmula 3. En esa categoría logró su primer podio (2do lugar) en el circuito de Monza, en Italia, el 29 de septiembre de ese año.
Carballo llegó al automovilismo gracias a su padre. "Desde pequeña lo acompañaba a todos las carreras, y eso me emocionaba, todo lo que tiene que ver con las carreras. Le dije a mi papá, yo también quiero y así empecé", recordó la joven de 21 años.
"Nunca le tuve miedo (al carro), y hasta ahora no le tengo miedo", dijo sonriendo para explicar que siempre amó estar dentro de un auto de carreras. "Mi papá soñaba con los motores y la velocidad, y yo también".
Curiosa y emprendedora
Le gusta estudiar e investigar sobre los avances del automovilismo. Lee, analiza y escudriña datos e informaciones sobre este tema. Su misión es saber que pasa "allá arriba". Así califica a la F1.
"Siempre estoy escuchando, reviso en internet sobre la F1, que si mejoran el KERS (sistema de recuperación de energía cinética) o cosas así, al final hay que estar informado de lo que pasa en la F1. Considero que estoy siempre estudiando e informándome".
Detalló algunos aspectos sobre el trabajo que hace tras las carreras. "Cada vez que sales del auto, tienes la telemetría (mide distancias, recoge información del auto, etc). Con eso puedes saber donde se están cometiendo los errores con respecto a otros pilotos, si estas frenando antes, si el carro se derrapa de atrás , los cruces. Analizas todos los datos del auto de casi todas las vueltas, a ver que puedes mejorar", explicó.
Pero su vida no solo es sudar en el gimnasio, manejar carros y estudiar acerca de las carreras de autos. Hay algo más. "Voy a empezar un curso de cocina, porque me gusta, podría ser chef", dice sonriendo. "De todo me gustaría cocinar, todo lo que sea comida gourmet , provocativa, no tengo una especifica", refirió.
De niña, antes de decidirse por el deporte a motor, practicó tenis y fútbol, pero al final se inclinó por el karting.
Es la segunda de tres hermanos. La mayor, de 23 años, es profesional universitaria y su hermano menor, que tiene 14, sigue sus pasos, compite en karting, y constantemente viaja a Europa a correr.
"Se ponen un poco triste cuando me voy, trato de compartir con ellos", recuerda Carballo cuando debe dejar su familia y su país natal.
Señala que su rutina de entrenamiento no es tan fácil como la gente cree. "La mayoría de las personas cree que es fácil, que en el automovilismo, porque vas sentado, no importa entrenar, pero pasan muchísimas cosas a nivel de cuello y espalda. Es algo increíble, debes entrenar muchísimo el cuello debido a la fuerza G (medida de aceleración) porque vas rápido y los autos son pesados, te esfuerzas mucho en curvas rápidas y para tener el carro dentro de la pista".
Se levanta las 7 de la mañana, va al gimnasio hasta las 12:30 del mediodía. "Hago mucho cardio, pesas, kayak, ciclismo, correr en la calle 10 kilómetros, y a las 3pm otra vez al gimnasio".
Para la alimentación debe consumir bastante carbohidratos. "No engordo porque todo lo quemo en entrenamientos", precisó.
Temporada 2013
"La temporada arrancó en abril en Francia. No ha sido fácil, hay muchísimo nivel, la mejor posición que he obtenido es un octavo lugar. He terminado en las posiciones 8, 9, 10 y 11, y bueno no ha sido tan fácil", recuerda la criolla.
Pese a esto, mantiene la confianza y calma, sus virtudes como piloto: "Ahorita que estoy en este equipo nuevo, Campos Racing, quedaron impresionados porque dicen que soy una persona extremadamente tranquila y muy reservada. Les impresiona un poco la calma que tengo y cuando las cosas no salen bien, sigo estando e intento controlarme, no es que voy a salirme del carro y discutir con todo el mundo, siempre conservo la calma", agregó la corredora.
Siente que aún le falta un plus para estar entre los primeros lugares. "Me falta entrar más en sintonía con el auto, siento que todavía no lo he desarrollado al cien por ciento y eso se logra haciendo bastantes entrenamientos con y poco a poco vas descubriendo cosas del auto. Eso me falta para estar en el primer lugar".
Carballo, con un futuro promisorio por delante, tiene la toda la confianza de su escudería. " Es el equipo en el que me he sentido mejor, la confianza que siento que nunca la había tenido. Adrián Campos, dueño del equipo, confía en mi y es está seguro que puedo llegar a la GP2 o F1".
Debido a su habilidad, dice que tiene todo el apoyo de sus mecánicos e ingenieros. "Los mecánicos se fijan en mi, porque soy más rápida que los otros pilotos del equipo".
Ante un mundo elitesco como la Fórmula Uno, dominado por hombres, no pierde la perspectiva de lograr su meta. "Necesito el apoyo de patrocinantes, es muy costoso, lo necesito para lograrlo y aparte de eso, tengo que entrenar muchísimo, el nivel de exigencia es muy alto, dar los pasos correctos, las categorías que corresponden, para no agarrar el camino equivocado. El camino sería F3, GP3, World Series Renault, GP2 y F1", acotó.
Así como Maldonado ganó en España una carrera de la máxima categoría en 2102, ella espera emular al volante de Maracay. "Me gustaría llegar a hacer lo que él hizo".
"Realmente no se porqué me puso (el comentarista deportivo, Max Leffeld) La Chama de Hierro", refirió Carballo, admiradora de Milka Duno y Pastor Maldonado, figuras del automovilismo criollo en el mundo.
"Desde ese momento todas las personas me llaman así, creo que es porque simplemente soy muy competitiva en la pista y siempre estoy peleando las primeras posiciones y darle la talla a los hombres", señaló la joven deportista durante una visita este martes a la instalaciones a la Agencia Venezolana de Noticias en Caracas.
Con esa misma cordura y nervios de acero, la caraqueña compite actualmente en la Fórmula 3 europea, campeonato inundado de hombres. Su meta es abrirse paso en el automovilismo, un deporte dominado por el sexo masculino. Pero Carballo tiene el coraje y el valor para afrontar este reto.
"Soy mejor que ellos, tranquila, eres mejor que ellos", es la frase de inspiración que pronuncia para aumentar su confianza cada vez que sale a la pista.
Ese ritual le ha funcionado. "Los hombres se humillan, cuando quedan detrás de mi, quedan humillados, te miran así (de reojo)", describió la corredora que dejó su carrera universitaria como corredora de seguros para conducir autos.
No es de esas mujeres temperamentales que saltan a discutir por algún toque o choque. Por el contrario cuando algo no sale según lo planeado, se controla y piensa en frío como solucionar el incidente.
Por luchar para alcanzar su sueño ha sacrificado estar cercar de su familia, aunque confiesa que no fue tan dura su adaptación en el exterior. "He tenido bastantes sacrificios, ir a Europa y alejarte de tu familia, es lo más complicado, no puedes vivir en tu país, porque estas siempre haciendo entrenamientos allá. Es bastante fuerte para mi como mi familia".
Continuó: "Llegué de cero (a Europa), no conocía ningún circuito, ningún equipo y fue bastante duro, y conté con la suerte de entrar a un equipo italiano, pero que lo dirigiría un costarricense y con la gente latina te las llevas mejor y eso me ayudó muchísimo, aprendí mucho con ese equipo y el golpe no fue tan fuerte, fue más fácil de lo que esperaba".
Sin miedo
Carballo tuvo 9 años en karting, cuando fue conocida como la "Chama de Hierro". Fueron sus primeros momentos de adrenalina en la disciplina.
Compitió en la Fórmula Renault italiana 2.0 con el equipo Costa Rica, y en 2012 llegó a la Fórmula 3. En esa categoría logró su primer podio (2do lugar) en el circuito de Monza, en Italia, el 29 de septiembre de ese año.
Carballo llegó al automovilismo gracias a su padre. "Desde pequeña lo acompañaba a todos las carreras, y eso me emocionaba, todo lo que tiene que ver con las carreras. Le dije a mi papá, yo también quiero y así empecé", recordó la joven de 21 años.
"Nunca le tuve miedo (al carro), y hasta ahora no le tengo miedo", dijo sonriendo para explicar que siempre amó estar dentro de un auto de carreras. "Mi papá soñaba con los motores y la velocidad, y yo también".
Curiosa y emprendedora
Le gusta estudiar e investigar sobre los avances del automovilismo. Lee, analiza y escudriña datos e informaciones sobre este tema. Su misión es saber que pasa "allá arriba". Así califica a la F1.
"Siempre estoy escuchando, reviso en internet sobre la F1, que si mejoran el KERS (sistema de recuperación de energía cinética) o cosas así, al final hay que estar informado de lo que pasa en la F1. Considero que estoy siempre estudiando e informándome".
Detalló algunos aspectos sobre el trabajo que hace tras las carreras. "Cada vez que sales del auto, tienes la telemetría (mide distancias, recoge información del auto, etc). Con eso puedes saber donde se están cometiendo los errores con respecto a otros pilotos, si estas frenando antes, si el carro se derrapa de atrás , los cruces. Analizas todos los datos del auto de casi todas las vueltas, a ver que puedes mejorar", explicó.
Pero su vida no solo es sudar en el gimnasio, manejar carros y estudiar acerca de las carreras de autos. Hay algo más. "Voy a empezar un curso de cocina, porque me gusta, podría ser chef", dice sonriendo. "De todo me gustaría cocinar, todo lo que sea comida gourmet , provocativa, no tengo una especifica", refirió.
De niña, antes de decidirse por el deporte a motor, practicó tenis y fútbol, pero al final se inclinó por el karting.
Es la segunda de tres hermanos. La mayor, de 23 años, es profesional universitaria y su hermano menor, que tiene 14, sigue sus pasos, compite en karting, y constantemente viaja a Europa a correr.
"Se ponen un poco triste cuando me voy, trato de compartir con ellos", recuerda Carballo cuando debe dejar su familia y su país natal.
Señala que su rutina de entrenamiento no es tan fácil como la gente cree. "La mayoría de las personas cree que es fácil, que en el automovilismo, porque vas sentado, no importa entrenar, pero pasan muchísimas cosas a nivel de cuello y espalda. Es algo increíble, debes entrenar muchísimo el cuello debido a la fuerza G (medida de aceleración) porque vas rápido y los autos son pesados, te esfuerzas mucho en curvas rápidas y para tener el carro dentro de la pista".
Se levanta las 7 de la mañana, va al gimnasio hasta las 12:30 del mediodía. "Hago mucho cardio, pesas, kayak, ciclismo, correr en la calle 10 kilómetros, y a las 3pm otra vez al gimnasio".
Para la alimentación debe consumir bastante carbohidratos. "No engordo porque todo lo quemo en entrenamientos", precisó.
Temporada 2013
"La temporada arrancó en abril en Francia. No ha sido fácil, hay muchísimo nivel, la mejor posición que he obtenido es un octavo lugar. He terminado en las posiciones 8, 9, 10 y 11, y bueno no ha sido tan fácil", recuerda la criolla.
Pese a esto, mantiene la confianza y calma, sus virtudes como piloto: "Ahorita que estoy en este equipo nuevo, Campos Racing, quedaron impresionados porque dicen que soy una persona extremadamente tranquila y muy reservada. Les impresiona un poco la calma que tengo y cuando las cosas no salen bien, sigo estando e intento controlarme, no es que voy a salirme del carro y discutir con todo el mundo, siempre conservo la calma", agregó la corredora.
Siente que aún le falta un plus para estar entre los primeros lugares. "Me falta entrar más en sintonía con el auto, siento que todavía no lo he desarrollado al cien por ciento y eso se logra haciendo bastantes entrenamientos con y poco a poco vas descubriendo cosas del auto. Eso me falta para estar en el primer lugar".
Carballo, con un futuro promisorio por delante, tiene la toda la confianza de su escudería. " Es el equipo en el que me he sentido mejor, la confianza que siento que nunca la había tenido. Adrián Campos, dueño del equipo, confía en mi y es está seguro que puedo llegar a la GP2 o F1".
Debido a su habilidad, dice que tiene todo el apoyo de sus mecánicos e ingenieros. "Los mecánicos se fijan en mi, porque soy más rápida que los otros pilotos del equipo".
Ante un mundo elitesco como la Fórmula Uno, dominado por hombres, no pierde la perspectiva de lograr su meta. "Necesito el apoyo de patrocinantes, es muy costoso, lo necesito para lograrlo y aparte de eso, tengo que entrenar muchísimo, el nivel de exigencia es muy alto, dar los pasos correctos, las categorías que corresponden, para no agarrar el camino equivocado. El camino sería F3, GP3, World Series Renault, GP2 y F1", acotó.
Así como Maldonado ganó en España una carrera de la máxima categoría en 2102, ella espera emular al volante de Maracay. "Me gustaría llegar a hacer lo que él hizo".
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