viernes, 28 de junio de 2013

Razones para otorgar el Premio Nacional de Periodismo a Hugo Rafael Chávez Fría


A lo largo de estos 14 años de gobierno, el Comandante enfrentó como nunca antes lo hizo otro Presidente, con valor y sin medias tintas, a las corporaciones mediáticas, tanto nacionales como internacionales, develando su hipocresía, su falso papel de soportes de la democracia y de guardianes de la libertad.
Chávez “puso al descubierto el rol de los medios de comunicación privados”, cuyo manejo y apropiación del derecho a la libertad de expresión sirvió como cortina de humo para esconder su verdadero papel de vehículos de propaganda ideológica al servicio del modelo capitalista, del poder imperial y de los grupos económicos, religiosos, militares. Además, con el poder que detentaban, se permitieron chantajear a los partidos políticos, atacar instituciones, difamar y calumniar a través de campañas sucias y montar un sistema judicial paralelo, sentenciando la inocencia o culpabilidad de personas e instituciones que osaban oponérseles.
Como censores ideológicos y guardianes de una democracia corrupta, acallaron las voces disidentes, sobre todo de líderes políticos y sociales, de intelectuales y el pensamiento de izquierda. Ocultaron y minimizaron las luchas, reclamos y clamores populares, que daban cuenta de un sistema perverso y agotado.
En el marco del resguardo y defensa de nuestra riqueza petrolera, actuaron en componenda con los intereses de las compañías transnacionales, al servicio del imperialismo estadounidense, llegando incluso a proponer la privatización de Pdvsa. Recordemos que las páginas económicas de los medios privados promocionaban al “meritócrata” Luis Giusti como el mejor gerente del mundo, y se escuchaban voces lanzándolo como candidato presidencial. Los medios igualmente propiciaron, en consonancia con las políticas neoliberales, el desmantelamiento del Estado, de manera que la eficiencia gerencial y la competitividad tipo IESA hicieran de Venezuela un coto privado.
En este aspecto podríamos afirmar que Chávez fue una especie de combatiente liberador, primero a través de la denuncia y la confrontación abierta con los dueños de los medios, y luego al propiciar un nuevo sistema de medios públicos para enfrentar la cayapa mediática opositora, mientras que, paralelamente, ampliaba el número y la fortaleza de los medios comunitarios para que el pueblo contara con sus propios órganos de expresión.
Con Chávez también nace Telesur, que dotó a los pueblos del Sur, sobre todo de Latinoamérica, de una propia voz, pantalla e imágenes. También se crea La Radio del Sur. No olvidemos que el Correo del Orinoco nació por iniciativa suya y Ciudad Caracas, impulsado por la Alcaldía del municipio Libertador, nace dentro del contexto y la necesidad de dar respuesta en la capital a los medios opositores privados.
Como comunicador, el presidente Chávez demostró lo equivocado que estaban los expertos en el ramo, multiplicadores de tesis y postulados sin asidero real. En un modo franco, transparente y sincero, estableció contacto con el pueblo sin necesidad de guiones, de poses acartonadas, de frases hechas, de ángulos de cámara y juegos de luces dirigidos. En este plano fue un verdadero innovador.
A través de “Aló, Presidente”, de sus sesiones televisadas de trabajo, de sus llamadas a distintos programas de radio y televisión, mantuvo informado al pueblo venezolano de cada una de las decisiones tomadas en el marco de su gestión de gobierno; en este rol superó a todos los presidentes de nuestra historia. Recordemos su oficio de columnista de opinión mediante “Las líneas de Chávez”, publicadas en distintos medios nacionales y regionales y la columna “Desde la retaguardia”, publicada en el Correo del Orinoco, durante su periodo de convalecencia.
Con respecto al uso responsable y ético de los distintos medios de comunicación, nos dio innumerables lecciones y ejemplos, al hacer uso de ellos para construir patria, rescatar nuestras costumbres, nuestra música, nuestros valores, e impulsar lo “afirmativo venezolano”. Chávez dictó cátedra de historia, promovió la lectura y el estudio, propició la unidad y la solidaridad entre los pueblos de América Latina, el Caribe, y del llamado Tercer Mundo. Además, como ser humano, nos dio lecciones de solidaridad y de amor por los más necesitados, y difundió los valores por los cuales la humanidad viene luchando desde hace siglos. Es decir, que Chávez no solo nos devolvió la patria, sino que nos invocó a quererla y, por otro lado, nos hizo más humanos.
Sibci/ Manuel Abrizo
NOTA: El premio no es postmórtem, sino en tiempo presente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario