Revelan más imputaciones contra ex primer ministro italiano

Nuevas declaraciones de uno de los implicados en el llamado caso Ruby complicaron hoy aún más las acusaciones contra el ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi por incitar a la prostitución infantil y abuso de poder. El conocido representante de famosos Lele Mora, uno de tres acusados en un juicio paralelo al de Berlusconi, confirmó comentarios de la prensa de que en las fiestas organizadas por el exjefe de Gobierno hubo desmesura, abuso de poder y degradación.
Hasta el momento, los abogados del magnate mediático insistían en que las llamadas fiestas bunga-bunga de su cliente eran “cenas elegantes y normales”.
Mora aclaró, sin embargo, que solo se encargó de traer a las fiestas realizadas en la residencia de Berlusconi en Ancore, cerca de Milán, a muchachas jóvenes, a quienes nunca obligó a actuar de una manera específica, ni las incitó a prostituirse.
Pero el referido representante admitió haber recibido un préstamo del también conocido como Il Cavaliere para efectuar sus negocios.
En el juicio, Emiro Fede, exdirector informativo del canal de televisión Rete Quattro, propiedad de Berlusconi, y Nicole Minetti, exconsejera de la región de Lombardia, también fueron imputados con cargos por abuso de poder e incitación a la prostitución infantil.
Las declaraciones de Mora complican la situación para la defensa del multimillonario italiano, quien fue sentenciado el pasado lunes a siete años de cárcel e invalidación indefinida para ocupar cargos públicos por el caso de la marroquí Karima El Maghrou, apodada Ruby.
De acuerdo con la fiscalía, Berlusconi recibió una decena de sesiones de favores sexuales de la joven marroquí cuando ésta apenas contaba con 17 años de edad, mientras en mayo de 2010 llamó a una comisaria para ordenar su liberación, tras ser arrestada por robo.
El exjefe de Gobierno también tiene pendiente una vista oral para el 19 de julio próximo, cuando debe analizarse otro caso en el que podría estar implicado en el pago de tres millones de euros al exsenador Sergio de Giorgio, en 2006.
De Giorgio, quien busca un arreglo con la justicia para una condena mínima de un año y ocho meses de cárcel, habría recibido el dinero para dejar su partido centrista y unirse al de Pueblo de la Libertad (PDL), con el fin de echar abajo al gobierno de Romano Prodi.
El PDL, creado por Berlusconi, perdió los comicios de 2006 frente a Prodi, quien, sin embargo, contaba con una pequeña ventaja de tres senadores (vitalicios) en la Cámara alta, aunque el Ejecutivo solo cayó en 2008 en otras circunstancias.
Además, el tres veces primer ministro italiano, quien logró salir airoso en más de una veintena de acusaciones en las últimas dos décadas, deberá esperar por un veredicto final en el llamado caso Mediaset que emitirá el Tribunal Supremo a finales de este año.
SIBCI/PL
En el asunto de Mediaset, una compañía mediática de la familia de Berlusconi, éste es acusado de fraude y malversación por distribución indebida de material fílmico en este país.