Caracas, 22 Jun. AVN.- Con la palabra hecha
poesía en sus manos, poetas de Venezuela y del mundo visitaron este
sábado, en el Cuartel de la Montaña, al líder de la Revolución
Bolivariana, Hugo Chávez, el gran homenajeado del X Festival Mundial de
Poesía, que comenzó el 16 de junio pasado y culmina este sábado, a las
6:00 de la tarde, en el Teatro Teresa Carreño.
Ramón Palomares, Reynaldo Pérez Só, Gustavo Pereira, Juan Calzadilla, Jorge Valero, Enrique Hernández D'Jesús, Luis Alberto Crespo, Lamiae El Amrani (Marruecos), Emma Villazón (Bolivia), Daniela Camacho (México), Edmundo Edmundo Herrera (Chile); el presidente de la Casa Nacional de las Letras Andrés Bello, William Osuna; y el ministro de Cultura, Fidel Barbarito, recorrieron el lugar donde está sembrado Chávez, hasta llegar a la Flor de los Cuatro Elementos, obra que no deja de ser poética.
Al Comandante le dedicaron, bajo un sol cálido, sus mejores poesías nacidas de los profundos recovecos del alma artista. Uno tras otro habló del amor, de las luchas libertarias de los pueblos y de todas esas historias reivindicativas de la vida socialista, sobre las que versó parte del discurso revolucionario característico de Chávez.
"Este es el mejor homenaje que le podemos hacer a un presidente como Hugo Chávez, tan cercano a nuestra sensibilidad, es pues leer poesía en su honor. Él era un amante de la poesía, lo demostró toda su vida. Probablemente no era un cultor de la poesía, pero en su vida demostró estar muy próximo a ella, tanto en sus hechos como en sus palabras y pensamientos", reflexionó el escritor y poeta Gustavo Pereira.
El fulgor de la palabra poeta
Luego del "hasta siempre, Comandante", dicho tras recorrer la Flor de los Cuatro Elementos, el grupo de trovadores se ubicó, en círculo, para recitar algunos poemas, en un acto informal pero cargado de una emotividad tan ardiente como el amor del pueblo hacia el líder.
El ministro Barbarito recitó la décima de su autoría Cuando en tus Ojos y exaltó la realización de la ronda poética para la expresarle amor y pasión al Comandante.
"Cuando en tus ojos me veo renace en mí la confianza de luchar por esta causa con sacrificio y esmero. Te ofrezco mi brazo artero y mi voz como una lanza. Mi pensamiento, mi canta y mi música vibrante, son para ti a cada instante, pues me colmas de esperanza", declamó y cedió el micrófono al resto de los compañeros, quienes no dudaron en inmortalizar sus poemas allá arriba, en el Cuartel de la Montaña.
Uno tras otro expresó sus letras convertidas en arte sonoro. Sonrieron en complicidad sensible y le brindaron al pueblo que les acompañó una experiencia nueva con la cual recordar a quien fuera el más nuestro de los nuestros.
Ramón Palomares, Reynaldo Pérez Só, Gustavo Pereira, Juan Calzadilla, Jorge Valero, Enrique Hernández D'Jesús, Luis Alberto Crespo, Lamiae El Amrani (Marruecos), Emma Villazón (Bolivia), Daniela Camacho (México), Edmundo Edmundo Herrera (Chile); el presidente de la Casa Nacional de las Letras Andrés Bello, William Osuna; y el ministro de Cultura, Fidel Barbarito, recorrieron el lugar donde está sembrado Chávez, hasta llegar a la Flor de los Cuatro Elementos, obra que no deja de ser poética.
Al Comandante le dedicaron, bajo un sol cálido, sus mejores poesías nacidas de los profundos recovecos del alma artista. Uno tras otro habló del amor, de las luchas libertarias de los pueblos y de todas esas historias reivindicativas de la vida socialista, sobre las que versó parte del discurso revolucionario característico de Chávez.
"Este es el mejor homenaje que le podemos hacer a un presidente como Hugo Chávez, tan cercano a nuestra sensibilidad, es pues leer poesía en su honor. Él era un amante de la poesía, lo demostró toda su vida. Probablemente no era un cultor de la poesía, pero en su vida demostró estar muy próximo a ella, tanto en sus hechos como en sus palabras y pensamientos", reflexionó el escritor y poeta Gustavo Pereira.
El fulgor de la palabra poeta
Luego del "hasta siempre, Comandante", dicho tras recorrer la Flor de los Cuatro Elementos, el grupo de trovadores se ubicó, en círculo, para recitar algunos poemas, en un acto informal pero cargado de una emotividad tan ardiente como el amor del pueblo hacia el líder.
El ministro Barbarito recitó la décima de su autoría Cuando en tus Ojos y exaltó la realización de la ronda poética para la expresarle amor y pasión al Comandante.
"Cuando en tus ojos me veo renace en mí la confianza de luchar por esta causa con sacrificio y esmero. Te ofrezco mi brazo artero y mi voz como una lanza. Mi pensamiento, mi canta y mi música vibrante, son para ti a cada instante, pues me colmas de esperanza", declamó y cedió el micrófono al resto de los compañeros, quienes no dudaron en inmortalizar sus poemas allá arriba, en el Cuartel de la Montaña.
Uno tras otro expresó sus letras convertidas en arte sonoro. Sonrieron en complicidad sensible y le brindaron al pueblo que les acompañó una experiencia nueva con la cual recordar a quien fuera el más nuestro de los nuestros.
AVN
22/06/2013 16:45
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